¿Has escuchado esto alguna vez?, ¿Es cierto?…La respuesta es SI y NO.
La respiración es importante, pero no hay que obsesionarse con ello.
Siempre nos han dicho eso de “canta con el diafragma” y no es más que un mito que puede hacernos mucho daño.
Nos obsesionamos con respirar bien cuando esa acción es algo instintiva.
Hay veces que la respiración (en según qué casos) sí puede ser la causa de una mala técnica vocal, pero repito…La solución es no obsesionarse con eso.
¿POR QUÉ NO DEBERIAMOS OBSESIONARNOS?
Porque al final estamos consiguiendo todo lo contrario.
-Terminamos estando más pendientes de si nuestra barriga sube y baja que restamos importancia al ejercicio vocal.
– Presionamos la barriga para hacer trabajar más el abdomen creando más falta de aire y tensión.
– Cogemos cantidades de aire excesivas que crean una presión innecesaria.
– Nos agobiamos y frustramos el doble al ver que no obtenemos los resultados deseados.
La idea es trabajar la respiración junto con los ejercicios vocales que hagas en tus clases de canto.
Nunca sola, siempre acompañada de la fonación para poder aplicarla correctamente a la hora de cantar de una forma más fluida.
El secreto es aprender a relajarnos durante la respiración.
La inhalación y la exhalación ha de ser suave y natural, no forzada.
Si conseguimos mantener una respiración relajada estaremos ayudando a que nuestro aire y nuestra voz permanezcan en equilibrio y perfecta armonía.
Además de que conseguiremos sacar el mejor rendimiento de nuestro sistema respiratorio y fonador.
EJERCICIO SENCILLO PARA EMPEZAR A PONERLO EN PRACTICA
Pon la mano en tu abdomen y nota como al respirar tu barriga sube y baja. Hazlo de una manera suave, sin apretar, para que tus hombros no suban.
Cuando consigas relajarte incorpora sonido a tu exhalación. Puedes hacer el sonido de un globo al desinflarse o cualquier vocal.
RECUERDA
No te frustres ni obsesiones con esto, trata de ir poco a poco añadiéndolo a tu rutina vocal.
Cada persona necesita unos tiempos diferentes así que, RELAJATE.